Se habla de prematuros cuando los bebés vienen al mundo antes de tiempo, es decir, antes de que se hayan cumplido 37 semanas de embarazo; a diferencia de los bebés a término que nacen entre 37 y 42 semanas de gestación.
Los partos prematuros están provocados por distintos factores como el estilo de vida de la madre durante el embarazo, ya que puede padecer diabetes, hipertensión, problemas renales o cardíacos, una infección, o simplemente no haberse alimentado bien en esta etapa. También se puede desencadenar debido al consumo de tabaco, alcohol o drogas ilegales.