Muchas veces los nervios y la ansiedad nos juegan una mala pasada que puede llegar a definir de manera negativa nuestra entrevista de trabajo, al igual que el generar un mal vínculo o comunicación con la persona que nos evalúa.
Un error es no reflejar de manera precisa y clara nuestras aptitudes. Muchas veces tenemos cualidades positivas pero si quedan en nuestro interior y no las mostramos es difícil que la otra persona pueda detectarlas. Es recomendable hacernos, antes de la entrevista, un resumen de nuestra vida laboral, como así también nuestras aptitudes y aspectos destacables de nuestra personalidad. Cuanto más fluido transmitamos el mensaje, mejor va a resultar la entrevista.
El llegar tarde puede ser uno de los motivos por los cuales quedar eliminadas para un trabajo. Los entrevistadores se valen de la información que logran recaudar, si una no respeta el horario tenderá a pensar que esta misma conducta se trasladará después.
¿Qué papel juegan los nervios para que las cosas no salgan como queríamos?
Siempre una entrevista es una situación de nerviosismo ya que solemos sentirnos evaluadas y eso hace que nos pongamos tensas. Tener las cosas estudiadas de ante mano permite poder ir más relajadas y hablar con mayor fluidez y firmeza. Muchas veces los nervios pueden llegar a provocar olvidos, no saber qué contestar ante preguntas o tartamudear al hablar, y este tipo de cosas pueden jugar en contra.
¿Cómo controlar los nervios cuando me están entrevistando?
La respiración puede llegar a ser un buen mecanismo para relajarnos y dejarnos guiar por la entrevista. Respirar lenta y pausadamente hace que nuestros músculos se relajen y logremos un mayor control sobre nosotras mismas. El tener pensamientos alentadores sobre el éxito de la entrevista puede ayudarnos.
¿Cómo manejar el estrés que produce una entrevista laboral?
Como dije antes, relajarnos, pedir afecto y protección a los seres que uno quiere, como pedir reconocimiento, nos ayuda a transitar los momentos de estrés con más soportes y de manera más relajada.
Consejos para una entrevista exitosa
Es importante tener la mayor información posible acerca del puesto a cubrir y cuáles son las expectativas nuestras que se esperan. Leer el aviso puede llegar a ayudarnos, esto nos permite ir con mayor información para movernos con más seguridad y astucia al momento de demostrar las habilidades y aptitudes personales en relación a los requerimientos.
Cuando sabemos de qué empresa se trata es recomendable leer la página web para recabar información adicional, eso demuestra interés, como así también nos permite alinearnos con los valores que poseen haciendo que entremos en sintonía y empatía con la institución. Todo esto nos ayudará a contrarrestar nuestra inseguridad.
La comunicación verbal es importante, pero también la no verbal adquiere muchas veces más importancia de la que algunas personas le prestan. Nuestra imagen personal, la forma en que nos mostramos al mundo, habla de quiénes somos y cómo nos movemos. La vestimenta tiene que estar acorde al puesto a cubrir y a la formalidad o no de la empresa.
Mostrarse con compromiso y prolijidad son valores que suelen ser calificados a la hora de tomar a una persona.
Siempre hay que dar una buena imagen sobre las experiencias pasadas y hablar bien de ellas ya que forman parte de nuestro historial y antecedentes en nuestra vida laboral.
Generar rapport o empatía con el entrevistador puede llegar a favorecer a la hora de dar una devolución positiva nuestra. Hablar, pero también dejar hablar, como así también mostrarse firme y sonriente en nuestras respuestas, seguramente ayuda a lograr una buena relación durante la entrevista.