El temor al fracaso nos limita completamente y dejamos de hacer cosas que nos aportan felicidad. Todo el mundo quiere tener éxito, conseguir grandes objetivos en la vida, pero sólo unos pocos lo logran. Son los y las valientes que no temen al miedo, que les da igual fracasar, pues saben que superarlo conlleva lograr todas las metas que se proponen.
Es cierto que a nadie le gusta que le digan que no, que rechacen sus ideas o ver como algo no sale de la forma que se esperaba. Pero la realidad es que todos cometemos errores, incluso los grandes empresarios han tenido fracasos en alguna etapa de su vida, pero ellos supieron seguir adelante y arriesgarse. No se echaron atrás sólo por pensar en lo que podía pasar. ¡No permitas que el fracaso te paralice!
Este temor a fracasar es algo que obtenemos desde que somos pequeñas, por eso es muy difícil quitarlo de encima. Pero también nos hace ser más prudentes, lo cual es algo positivo. No obstante, hay que saber dónde están los límites y cuándo este sentimiento perjudica más que beneficia.
Saber combatir este problema ayuda de forma notable a la hora de alcanzar los éxitos personales. La valentía es clave, pues aunque se siga teniendo el sentimiento dentro, se está afrontándolo para que sea algo inapreciable.
Cinco claves para superar el miedo
1-Por la mañana anotá todos los pensamientos negativos que te vengan a la cabeza durante 5 minutos. Leelos y volvé a escribirlos pero con un enfoque positivo. Tu cerebro grabará el contenido y anulará los malos sentimientos.
2-Contestá a las siguientes preguntas: ¿qué es lo peor que puede pasar? ¿qué éxitos tendré si sigo adelante? Al final te darás cuenta que lo positivo es mucho más grande, minimizando los puntos negativos.
3-Los líderes no tienen miedo salvo a no mejorar cada día, a romper la disciplina o a no lograr las metas. Nada les para en el camino porque saben que hay que superar los obstáculos para llegar al éxito.
4-Tené siempre un plan B a mano. Improvisar no es recomendable por eso hay que tener un respaldo por si el A no sale como tenías pensado. Aprovechá los recursos que ya tenés para intentar que esta vez salga bien. Además debés gestionar el riesgo de forma notable.
5-Pensá en las consecuencias. Analizá todo lo que puede pasar, lo bueno y lo malo. De esta forma tendrás claro qué riesgo al fracaso puede existir y cuáles son los beneficios de alcanzar el éxito.
Así entenderás mejor qué es lo que te estás planteando y verás el miedo como algo con poca importancia, obteniendo una decisión que sea adecuada para vos.