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Jue, Mar

Plasma Rico en Plaquetas: vanguardia al servicio de la medicina

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El plasma rico en plaquetas (PRP) es un tratamiento autólogo y ambulatorio, cuyo fundamento es utilizar los Factores de Crecimiento (FC) que se encuentran dentro de la plaquetas sanguíneas. Dichos FC tienen la potencialidad de bioestimular el tejido de la piel en el cual se colocan y, de este modo, logran una mejoría general del aspecto de la piel, que adquiere turgencia, elasticidad y brillo, recuperando lo que ha perdido con el transcurso de los años y los múltiples tóxicos.

 En estética, el PRP tiene varias aplicaciones, ya que provoca rejuvenecimiento y revitalización porque actúa sobre todas las estructuras de piel y tejidos, estimulando la producción de fibroblastos, fibras colágenas y elastínicas. De esta manera, no solamente se logra mejorar la apariencia de la superficie sino también las formas y los volúmenes. 

El PRP se obtiene de la sangre del paciente, y por eso decimos que es autólogo. Extraemos un volumen de sangre cuya cantidad dependerá de las zonas a tratar (desde 20 cc hasta 60 cc). Esta sangre, colocada en tubos estériles, es llevada a una centrífuga especialmente calibrada para el procedimiento; el producto obtenido se activa con cloruro de calcio y la aplicación la efectúa el médico hematólogo. 

Las diferentes maneras de aplicar el PRP están subordinadas al objetivo que se quiere lograr. Puede ser: 

1) Como mesoterapia intradérmica: para bioestimular superficies.

2) En dermis profunda: para dar volumen combinada o no con implantes de grasa.

3) Combinada con la aplicación de hilos tensores o de autosustentación. En este caso optimizará el resultado de dichos hilos.

4) Para relleno de arrugas superficiales.

5) Para mejorar y esfumar estrías y secuelas de acné y poceado de celulitis.

6) Para lo que llamamos rejuvenecimiento vaginal no quirúrgico, mejorando no sólo la tonicidad de los músculos de las paredes vaginales y la sequedad vaginal sino también disminuyendo la incontinencia urinaria que afecta a muchas mujeres que transitan la menopausia. Además se revitaliza la mucosa de labios mayores y menores, y Punto G.

7) Tratamientos capilares: en alopecias androgénicas o areatas, éste es un tratamiento de estimulación del bulbo piloso que mayormente se aplica a pacientes varones. 

La frecuencia de aplicación que recomendamos en estética es no menos de dos veces en el año y siempre combinado con otros procedimientos que optimizarán los resultados. La mesoterapia tradicional y los tratamientos cosmiátricos contribuirán a que el resultado sea excelente. 

Por todo esto, el PRP es vanguardia en estética y, del mismo modo, está al servicio de otras especialidades médicas que también lo utilizan, como odontólogos para implantes dentarios; traumatólogos para implantes de cadera, rodilla, esguinces, desgarros, hematomas y toda patología osteotendinosa –sobre todo en deportistas–; flebólogos en tratamiento de úlceras arteriales y venosas; y veterinarios para lesiones osteotendinosas en caballos de carrera. 

Toda paciente que realice este tratamiento debe ser evaluada con un control previo de recuento de plaquetas para asegurar el éxito, y está contraindicado en personas con recuento de plaquetas por debajo de límites normales, pacientes anticoagulados o antiagregados que no puedan suspender su medicación cinco días antes del PRP, quienes cursen enfermedades infecciosas o consuntivas, o con antecedentes de tumores en actividad y con enfermedades autoinmunes en actividad. 

La principal ventaja del PRT es la de contar con un producto obtenido de la sangre de la misma paciente. Ésto elimina el riesgo de reacciones alérgicas y de transmisión de enfermedades por contagio. Asimismo, como es un procedimiento ambulatorio, la paciente se retira a sus actividades habituales sin inconvenientes. 

La obtención del producto debe ser realizado por un profesional hematólogo o hemoterapeuta, que es quien sabe, conoce y está autorizado a manipular sangre y hemoderivados. Así lo establece la Ley de Sangre en nuestro país y esto también hace que la paciente se sienta segura y tranquila con respecto a la excelencia del tratamiento.