Cada vez sentirnos y vernos como mujeres plenas, implica más desafíos. Hoy no alcanza con ser buenas madres y profesionales, necesitamos comunicar con nuestra imagen, es decir, los equipos que elegimos cada día deben estar conformes con nuestras actividades y con nuestros valores.
En la actualidad, la moda, las tendencias y la forma de usar las prendas nos pueden confundir y no sabemos diferenciar el cómo, cuándo y dónde está permitido ese look. Pareciera que existe un “vale todo”, que asusta a muchas mujeres, las paraliza, porque creen que, el realizar cambios en su look, las hará lucir muy llamativas.
Nada de esto es cierto como nos muestran las revistas de moda o las publicidades. Sí existen herramientas simples, hábitos, que, al llevarlos a la práctica, te permiten desarrollar tu propia identidad, lo que se llama marca personal.
Todas tenemos el poder de ser mujeres distinguidas, elegantes y con estilo propio, si trabajamos en ello. Para comenzar, es importante mirarte en el espejo para reconocer las partes de tu cuerpo que te dan seguridad y, a partir de ese momento, elegir:
-Prendas que beneficien tu silueta, sabiendo respetar los largos adecuados para potenciar tu feminidad.
-Analizá los colores que se repiten en tu guardarropa, ellos son los que realmente te identifican.
-Apostá al accesorio, con el cual estás cómoda, no sentís su peso al llevarlo. Ahí poné un toque de color, para sumar actualidad a tu imagen.
-Salí del pantalón de jean, por suerte hoy existen muchas texturas alternativas como la gabardina, el crepe, el tizado, el lino entre otras que te darán un look más actual.
Llegó el momento de elegir: ¿te quedás como éstas o te animás al cambio?