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Vie, Abr

Cuerpo rectángulo

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 A simple vista podríamos decir, que el cuerpo en forma rectángulo es el ideal, porque así lo identifica la estética en las modelos que solemos ver desfilar en las más codiciadas pasarelas del mundo, pero esto no es tan así; como todos los cuerpos, éste también tiene sus pros y sus contras.

En este tipo de forma corporal, las medidas de los hombros y las caderas están más compensadas y, vistas de frente, parecen tener el mismo ancho. A su vez se carece de redondeces y el busto y la cola suelen ser poco prominentes.

Para equilibrar visualmente esta figura, hay que intentar difuminar las líneas rectas. Darle forma añadiendo volúmenes, tanto en caderas como en hombros, para que visualmente se consiga que la figura sea similar a una silueta del tipo Reloj de Arena, que conoceremos más adelante.

¿Cómo vestirlo entonces?

La mejor manera de crear curvas es usando texturas y siluetas correctas:

-Buscá siempre estilos femeninos como volados, lazos, encaje y pliegues, ya que este tipo de cuerpo es semejante al masculino.

-Las chaquetas pueden ser cortas o largas con corte en la cintura, los modelos asimétricos dan la ilusión de curvas en los lugares correctos.

-En los pantalones hay que evitar los chupines. Son más recomendables los que tienen pliegues ya que es la manera más fácil de crear caderas falsas. Los pantalones Oxford o pata de elefante son una opción válida, y están de moda, usalos con una camisa extra large y zapatos con plataformas.

-Las camisas con escotes estilo corazón generan la ilusión de un busto más grande. Si necesitás un escote más conservador buscá camisas con volados o cuello abuchonado.

-El cuello bote al dejar más piel al descubierto da la sensación de hombros bien marcados.-Las faldas pueden tener colores llamativos, usá colores femeninos y modelos con  lazos, pliegues y volados para darle el volumen que le falta a tu cadera. 

Referentes: Florencia de la V, Valeria Maza, Milagros Schmoll, Nicole Newmann, Dolores Barreiro. 

La moda debe ser un instrumento para hacernos ver más bellas, y no un padecimiento para parecer algo que no somos.