25
Jue, Abr

Espejito espejito…¿Cuál es el corte de pelo que me queda más lindo?

Typography

Nos encanta cambiar de look, variar el corte del cabello. Sentimos que nos carga de energía y nos levanta la autoestima. Pero, a veces no coincide el estilo que queremos con lo que realmente nos queda bien. Por eso, te decimos cuáles son las opciones que podés hacerte según la fisonomía de tu rostro, para que luzcas hermosa con  un estilo personal.

Para darte cuenta qué tipo de rostro tenés podés mirarte en el espejo con el pelo hacia atrás, y cotejar tus facciones con las siguientes características:

Rostro cuadrado: el rostro es tan largo como ancho, es decir, la mandíbula tiene el mismo largo que las sienes y formas rectas. En este caso conviene usar el cabello por el hombro y con flequillo, para afinar el rostro, con mechas para suavizar los ángulos de la cara y volumen en la coronilla para alargarla. Los peinados recogidos dejan más a la vista la mandíbula, por eso hay que evitarlos.

Las caras rectangulares, son más largas que anchas y el estilo de corte recomendado es el del caso anterior, con más movimiento en la parte superior de la cabeza y tapando las mejillas.

Las que tienen el rostro redondo, se caracterizan por tener el largo y el ancho de la cara del mismo tamaño pero en forma de círculo, mentón redondeado, frente ancha y corta, mejillas grandes y contornos suaves. Como hay que afinar los rasgos, no se recomienda el pelo corto con volumen en los laterales de la cara, la raya al medio o el flequillo. Lo mejor es usar el cabello largo hasta la mitad de la espalda, con terminación en pico, desmechado a la altura del mentón y pegado a la cara.  

La cara ovalada es la ideal, la más equilibrada, es más larga que ancha, la frente es amplia y la mandíbula se va angostando. La mayoría de los cortes van bien con este tipo de rostro, de todos modos, es mejor no taparlo mucho, para que no se angoste más.

El alargado, es un rostro largo y delgado en general, pero con frente amplia. Altamente recomendado los cortes por los hombros, con volumen en los laterales para que se acorte, y el flequillo. Si tenés el pelo largo, te conviene que la parte de adelante sea más corta. No se aconsejan los lacios porque hay que engrosar un poco el rostro, y con los rulos se logra ese efecto.

El rostro triangular o de pera, se caracteriza por tener más ancha la parte de la mandíbula y la mejilla y la frente más pequeña, da una forma de un ángulo invertido. Para este caso, el flequillo es altamente recomendado para que se destaque más la zona superior del rostro y diferentes largos de capas dejando los pómulos libres para no resaltarlos más. En la parte superior hay que darle volumen y no hacerse raya al medio.

Por último, las que tienen forma de corazón son aquellas de frente ancha pero angosta, mejillas grandes, y el mentón pequeño y anguloso. Es ideal el flequillo para ocultar la frente, el largo a la altura de los hombros o del mentón y desmechado, para dar volumen, así da la sensación de que no es tan angosta la parte inferior del rostro.

Te dijimos cuáles son los cortes que podés hacerte según tu tipo de rostro, para que puedas destacar las zonas más frágiles y disimular las más notorias, logrando así el adecuado equilibrio que te hará estar más bella.