Una de las consultas más frecuentes en esta época del año es acerca del cambio de aspecto de la piel. Terminado el color y el aspecto vital que lucía en el verano, ahora el cutis se ve menos luminoso y hasta un poco reseco. ¿Por qué la piel se ve opaca? ¿Por qué todavía la tenés reseca si usás un hidratante todos los días? ¿Por qué se resquebraja tanto últimamente?
"Si bien hay muchos factores que pueden producir que la piel se vea opaca, con aspecto reseco, el primer paso es observar clínicamente la piel de la paciente para determinar su tipo y su estado de salud", observa la Doctora Silvana Alvarez, médica especialista en Estética (UBA), MN 110652, MP 227312, miembro de SOARME, CACE Y AMA., directora de Maestro Estética y Medipro Delta (www.maestroestetica.com.ar).
Cuando la opacidad o las manchas de la piel no tienen una causa que pueda atribuirse a una patología, estamos ante un tipo de piel seca o bien ante una piel deshidratada por falta de humedad. Y éstas son las pieles que más sufren las consecuencias en esta época del año, motivo por el cual exigen cuidados especiales.
El tratamiento para restablecer el equilibrio que las pieles secas y las deshidratas necesitan puede o no coincidir, ya que la estructura de la dermis no es la misma, aunque sí lo es su aspecto.
¿Qué son y cómo se tratan en otoño las pieles secas y las deshidratadas?
La piel seca es una falta de aceite y lípidos en la piel y está relacionada, en gran medida, con la singularidad de cada persona (es uno de los 3 tipos de piel, además de normal y grasa) y podría decirse que es una característica innata. Su origen es la falta de producción de aceite natural en las glándulas sebáceas dentro de los folículos capilares. Se observa como una piel áspera, opaca y escamosa.
Factores que originan o empeoran la piel seca:
- Genética
- Clima: bajas temperaturas, viento y radiaciones ultravioletas
- Tabaquismo (tanto fumadores activos como pasivos )
- Estrés
- Algunos medicamentos
- Envejecimiento hormonal
- Uso inadecuado de productos para la piel.
- Poco descanso
- Consumo excesivo de alcohol.
Qué necesita: la piel seca necesita reponer humedad, aceite y lípidos protectores para su funcionamiento correcto.
Por su parte, la piel deshidratada es una piel que puede ser una piel normal, seca o incluso grasa, pero se ve reseca porque no tiene agua. Esto puede deberse a varios factores: la falta de ingesta de líquidos, las agresiones climáticas (sol, viento, aires acondicionados, calefacciones), medicamentos o el uso de productos que no son adecuados para su tipo de piel. La piel deshidratada se presenta apretada, opaca y sin un brillo saludable.
También suele ser un factor que puede producir afecciones más importantes como alergias o acné. Esto ocurre porque reacciona al desequilibrio y, en un esfuerzo por recuperarse, aumentará su producción natural de sustancias seborreicas para compensar. Esta afluencia de sebo puede conducir a brotes acneicos.
Factores que originan o empeoran la piel seca:
- Clima: bajas temperaturas, viento y radiaciones ultravioletas.
- Tabaquismo (tanto fumadores activos como pasivos).
- Estrés.
- Algunos medicamentos.
- Envejecimiento hormonal.
- Uso inadecuado de productos para la piel.
- Poco descanso.
- Consumo excesivo de alcohol.
Qué necesita: la piel deshidratada necesita rehidratación que se puede obtener mediante la ingesta mayor de líquidos y también con tratamientos locales con productos para el cuidado de la piel que ayudan a unir el agua con la piel (humectantes). Los ingredientes a buscar son ácido hialurónico, glicerina y miel.
La solución para las pieles secas y deshidratadas
Si bien el origen no es el mismo, las formas de revertir los procesos de sequedad y deshidratación, en muchos casos son coincidentes.
Hay que evitar usar jabones de tocador, lavarse el pelo en la ducha dejando que el shampú escurra sobre el rostro y tomar sol en exceso.
Los cuidados básicos que hay que realizar siempre son higienizar antes de acostarse porque la piel durante la noche rejuvenece (la piel que se encuentra sucia es una piel que no respira y por lo tanto va a lucir opaca); aplicar lociones según la edad y el tipo de piel y productos para nutrir e hidratarla, éstos deben ser específicos para el contorno de ojos y para la zona peribucal y, además, una crema nutritiva para la piel seca.
La solución consiste en un combo de pasos que, cumplidos en forma regular, aseguran un aspecto lozano y vital de la piel.
- Higiene (cuidados básicos).
- Renovación celular incluyendo compensación y reparación de zonas puntuales (como las mencionadas en los cuidados básicos).
- Estimular con aparatología si fuera necesario.
- Máscaras nutritivas.
- No olvidar de tratar también el cuello y el escote.
- Es fundamental usar en forma cotidiana una adecuada protección solar.
Según explica la Doctora Silvana Alvarez: "No hay una fórmula única ni mágica para tener una piel saludable. Es importante brindarle cuidados y tratamientos en forma continua, ya sean domiciliarios o en gabinete. Eso es lo que marca la diferencia entre una persona que cuidó su piel y la que no la cuidó, teniendo la misma edad".