Siguen los intensos días de calor en los que el termómetro se dispara y la temperatura puede llegar a ser extrema.
Los bebés y niños pequeños, los adultos mayores de 65 años y los enfermos crónicos, suelen ser los más vulnerables. Por eso, es importante aprender a identificar sus síntomas, para tomar las precauciones necesarias, actuar lo más rápido posible y evitar problemas.
Cinco consejos a tener en cuenta:
1. Beber mucho líquido. Ingerir agua varias veces al día (al menos dos litros diarios) para mantener una hidratación adecuada. Evitar las bebidas alcohólicas y muy azucaradas, además de café y té.
2. Evitar la exposición al sol en exceso. Especialmente en las horas de mayor radiación, entre las 11 y las 15. Utilizar el protector solar adecuado.
3. Comer sano y alimentos frescos. Ingerir alimentos livianos como las frutas y verduras. Llevar una dieta equilibrada y evitar las comidas abundantes y pesadas.
4. Mantenerse refrescada. Se recomienda permanecer en sitios frescos y con sombra. Utilizar paños húmedos o tomar duchas rápidas.
5. Vestir ropa holgada. Con tejidos ligeros y de colores claros. En lo posible, cubrirse con una gorra o sombrero para prevenir insolaciones.
Estas recomendaciones funcionan como una guía de prevención para transitar las altas temperaturas, y contribuyen a un rápido y correcto accionar en situaciones extremas.