Hoy podemos elegir qué clase de adultos mayores queremos ser. En otra época ser mujer y pertenecer a la tercera edad, significaba tal vez cobrar una jubilación, mirar las telenovelas de la tarde, dormir la siesta, concurrir más seguido al médico, hacerles pastelitos a los nietos, tejer, y demás.
En la actualidad podemos afirmar que muchas mujeres a partir de sus 60 años, disfrutan de una impecable animosidad y vitalidad. Comprometidas con una vida activa y saludable procuran seguir desplegándose como profesionales, social y familiarmente y, en muchos casos, de manera creativa continúan brindando su aporte a su entorno.
Otros tiempos
Sin duda la ciencia, la tecnología, la educación, la información accesible, da paso a una mayor conciencia de ser. Paralelamente a ello, se ha prolongado de manera singular la expectativa de vida. Entonces una gran franja de mujeres de esta etapa etaria han decidido no mirar pasar la vida desde la ventana y son activas y partícipes en su medio.
¿Qué es ser una mujer sexalescente?
Con la confianza y el saber que le brindan los años y la conciencia de lo valiosa que es la salud, la mujer sexalescente, puede decirse que transita el paso de los años intentando sentirse plena:
-Procura una buena alimentación y actividad física adecuada para beneficio de su cuerpo.
-Participa de alguna actividad profesional, laboral, de ayuda o creativa que la compromete a diario.
-Se actualiza indagando, investigando o canalizando acerca de sus inquietudes, saberes o gustos.
-Participa de una vida social que armonice con sus tiempos de trabajo y descanso. Valora la amistad y deja también espacios para gratificarse con ella.
-Habitualmente se encuentra motivada por algún proyecto por más simple o pequeño que sea.
-Su sensibilidad le permite disfrutar del amor y otros afectos.
-Entiende la importancia del goce de la vida y puede comprobarse en ella, una mirada optimista frente a los sucesos cotidianos y más aún ante ciertas adversidades.
¿Quién puede ser una mujer sexalescente?
Hoy sabemos que una emocionalidad saludable tiene un papel primordial en todo lo que somos y hacemos. Prepararnos emocionalmente para los años venideros es dejarnos fluir sin temores, una actitud positiva ayudará considerablemente a prevenir malestares.
Sin duda seguimos participando de tiempos cambiantes. Surgen entonces nuevos nombres que se le otorgan a estas nuevas formas de ser sexagenaria. Estas mujeres, lejos de querer dejar de ser adolescentes, llevan el eterno júbilo en su sentir. Se sienten plenas, comprometidas con la vida y motivadas, en lugar de luchar contra la vejez, se han amigado con ella.