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Sáb, Abr

Amigas, nuestras hermanas elegidas

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Las amigas son necesarias para hacernos crecer y reconfortarnos. Cuando el vínculo de amistad es saludable, se puede ser quien verdaderamente una es, sabiendo que seremos aceptadas más allá de los logros, aciertos y errores, y que somos valiosas para quien, o quienes, ofrecemos nuestra amistad.

Lo que sustenta esta unión es el auténtico afecto, es la generosidad de una relación no posesiva y de respeto por las individualidades.

El compartir con amigas, potencia las alegrías y alivia los malestares. La  hermandad de la amistad permite que cada una pueda ponerse en los zapatos de la otra, no para tomar su rol sino para comprender y ayudar desde donde sea posible.

Tener amigas es beneficioso para la salud emocional

Permitirse los espacios con amigas abre las puertas del propio mundo. La escucha comprensiva es un ejercicio que en el vínculo de la amistad se da casi de manera espontánea.

El entorno siempre nos refleja aspectos propios que muchas veces nos cuesta reconocer. Qué mejor que un alma gemela para que nos devuelva imágenes nuestras que nos ayuden a entendernos e integrarnos.

Ante la despersonalización, ese ninguneo del que hablamos muchas veces, las sensaciones desbastadoras que sentimos en ocasiones ante el reflejo aparente de no existir, ¿qué puede ser mas reparador que el encuentro con aquellas personas que nos ven, nos reconocen y nos ayudan a tener otra mirada ante nuestro pesar?

Cuando una misma logra aflorar en ese tipo de relación, permite el darse cuenta del valor y significado que tiene la amistad para transitar la propia vida. Entonces se entiende el vínculo como una construcción a la que hay que cuidar con el cariño y respeto que merece.

Amigas, hermanas elegidas, almas gemelas, compinches, compañeras y mucho más, hacen que cada etapa de la vida se viva con mayor confianza, más alegría y menos angustia. Saber que están para una, que una está para ellas, da muchas veces el aliento necesario y el estímulo suficiente para apreciar la vida de una particular manera, sabiendo que no estamos solas.