Los cuidados de la piel en esta época del año no cambian de forma rotunda respecto al verano, salvo el poder usar ácidos de mayor concentración sin temor a enrojecimientos causados por el sol. Al contrario de lo que se cree, la humectación en invierno es indispensable, primero porque debe compensar el uso de ácidos y segundo porque el viento, el frío y los cambios de temperatura resecan la humedad natural de la piel.
Consejos para el cuidado del rostro:
-Durante estos meses, las pieles grasas y secas necesitan de los mismos cuidados: el de remover la piel vieja y humectarla. La diferencia va a radicar en los vehículos de las cremas ya que en las pieles grasas deben ser ligeros y en las secas, los más oleosos permitirán mantener humectada la capa cornea por más tiempo.
-Hay que considerar que las pieles grasas son en general muy sensibles e intolerantes, por lo tanto se recomienda comenzar de a poco con los ácidos en frecuencia y concentración, para evitar enrojecimientos y eccemas inútiles.
-No pueden faltar un limpiador y un humectante adecuado para todo tipo de piel.
-El invierno es la época ideal para tratar rostros, porque el sol está mas suave, por lo tanto evitamos posibles complicaciones, en especial con las manchas. Una vez por mes es una frecuencia razonable para prácticas de consultorio, ya sea cosmética o de tipo láser.
Consejos para el cuidado de la piel del cuerpo:
-Los vehículos de las cremas son sumamente importantes, por confort, resultado y aceptación por parte de la paciente. En general la gente no desea sentirse "pegoteada" con la ropa, por lo tanto recomiendo las emulsiones a base de urea o ácido láctico que cumplen la misma función que el humectante.
-Hay que masajear bien y aplicar generosamente la crema, así se logra cumplir todos los objetivos: humectar y dar comodidad con una aplicación diaria.
-No puede faltar un exfoliante que puede ser usado una vez por semana y un humectante de las características mencionadas (para cada tipo de piel).
-Debe tenerse en cuenta que las zonas más secas son las mas alejadas de la zona central del cuerpo, es decir brazos y piernas. Ahí debe ponerse el mayor esfuerzo.
- En los cambios de temporada se recomiendan las exfoliaciones.
-Usar protector solar adecuado para cada piel si se realiza actividad al aire libre. Además, hay que ingerir abundante líquido.
-El uso de guantes favorece la permanencia de la humedad en la piel, es muy frecuente ver manos resecas por el frío, el lavado permanente y por el uso y abuso de geles antisépticos, sin la respectiva humectación.
Qué hacer en Gabinete:
En este período pueden realizarse sesiones de peeling más agresivos. También aplicarse Luz Pulsada para tratar las manchas, melasmas, fotodaño o CO2.
A su vez, se pueden resolver problemas de flacidez, arrugas peribucales, o en toda la cara, cicatrices de acné.
El momento es ahora. Tener una piel siempre hidratada y radiante está en tus manos.